Me interese por este autor luego de leer un reportaje de Tomas Eloy Martinez en el suplemento cultural de La Nación. Asi que como este año había leido pocas novelas y recordando la extraordinaria películas Cigarros, mas el aporte de mi hermana que leyó Ciudad de cristal, me lo compre. Son unas doscientas cincuenta páginas y me lo leí en tres días (gracias al imsomnio). Está muy bien escrito, el autor mantiene la tensión todo el tiempo, y estuve leyendo esperando el acontecimiento mágico que transformara a una simple novela en literatura fantástica. Un libro para tener en cuenta.
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