La obra empezo bien, como una comedia absurda, con una familia disfuncional de clase media en caida y con el agregado interesante de una madre militante atrapada por su ideologia. Hasta la mitad fue entretenida pero luego hizo un giro hacia el drama y la historia empezo a decaer, ya no habia ironia ni humor y falto mucho para conmover al publico. Buena actuaciòn de Alicia (Tamara Alfaro).
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